Según el Comisionado Nacional de Derechos Humanos, en el 69% de los casos de niñas, niños y adolescentes desplazadas o en riesgo de desplazamiento, el principal responsable fueron las maras y pandillas, 22% una personas desconocida, 5% las bandas criminales y 4% personas conocidas
La violencia causó el desplazamiento forzado de 1,162 niñas, niños y adolescentes en Honduras entre 2019 y 2021, informó este viernes la titular del Comisionado Nacional de Derechos Humanos, Blanca Izaguirre, quien advirtió sobre los peligros que sufre la niñez en el país.
Izaguirre indicó en un comunicado que la niñez es uno de los sectores de la población hondureña “más vulnerables directa e indirectamente” por el desplazamiento forzado.
Advirtió sobre los peligros que enfrenta a diario la niñez en Honduras, donde están “desprotegidos por el Estado, son susceptibles para ser cooptados por las maras y pandillas o el crimen organizado y tienen amenazadas familias enteras que se oponen a que sus niños se incorporen a las actividades delictivas de estos grupos”.
Izaguirre dijo que el desplazamiento forzado de menores de edad debe ser motivo de reflexión de las autoridades, a quienes instó a tomar “acciones inmediatas para evitar que más niños sigan huyendo” de sus lugares de origen.
La titular del organismo de derechos humanos ha pedido varias veces al Congreso Nacional de Honduras que discuta y apruebe la Ley para la Prevención, Atención y Protección de Personas Desplazadas Internamente.
“Instamos a discutir y aprobar dicha ley para garantizar una respuesta integral a la población desplazada y a las comunidades afectadas por la violencia y el desplazamiento forzado”, subrayó Izaguirre.
La adopción de la ley contribuirá “al establecimiento de mecanismos de protección para la niñez y la población en general”, añadió la defensora del pueblo hondureño.
POLÍTICA DE PREVENCIÓN DE LAS CAUSAS DEL DESPLAZAMIENTO
Además, permitirá formular una política nacional de prevención de las causas del desplazamiento, clarificar los criterios de competencias y roles de las instituciones y la complementariedad con organizaciones de sociedad civil y organismos internacionales, explicó.
“No se justifica cómo en las actuales circunstancias de violencia que vive el país, nos estén privando a los hondureños del recurso humano más valioso: la niñez”, enfatizó Izaguirre.
Entre 2019 y el 2021, el organismo de derechos humanos atendió 2,775 casos de desplazamiento forzado o en riesgo de desplazarse que afectaron a 6,675 personas, de ellas 1,162 eran niñas, niños y adolescentes.
El 58% de los menores de edad se desplazó por amenazas, 13% por el asesinato de un familiar, 11% por extorsión, 5% por temor a ser reclutados por las maras, 5% por tentativa de homicidio y 5% por violencia doméstica y el despojo de su vivienda.
Según el Comisionado Nacional de Derechos Humanos, en el 69% de los casos de niñas, niños y adolescentes desplazadas o en riesgo de desplazamiento, el principal responsable fueron las maras y pandillas, 22% una personas desconocida, 5% las bandas criminales y 4% personas conocidas.
En 2021, la Unidad de Desplazamiento Forzado Interno atendió 568 casos de niñas, niños y adolescentes desplazados o en riesgo, de ellos, 70% tenía menos de 12 años de edad.
La titular del Comisionado de los Derechos Humanos agradeció los esfuerzos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y de las agencias de cooperación internacional que apoyan a Honduras para brindar una respuesta a las personas víctimas o en riesgo de desplazamiento.
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